¿Has fantaseado con una orgía? ¿Sientes curiosidad por el BDSM? La vida está para vivirla, así que no te avergüences de hacer realidad tus fantasías sexuales.
Las fantasías sexuales están pensadas para estimular tus sentidos, romper barreras y ofrecerte una visión sin riesgos de un mundo alimentado por una energía intensa como ningún otro.
Es un lugar donde tus anhelos más profundos, oscuros y pervertidos cobran vida. La cuestión es que muchos de nosotros optamos por dejar estas fantasías exactamente donde están: en nuestra imaginación.
¿Te has preguntado alguna vez cómo sería trasladar esas fantasías a la vida real? ¿Te has preguntado si te sentirías igual de saciado haciéndolas de verdad y no sólo en tu mente? Pues sólo hay una forma de averiguarlo.
No tengas miedo de probarlo porque, sinceramente, ¿qué es lo peor que puede pasar? ¿Amplías tus horizontes sexuales? ¿Pruebas algo nuevo? ¿Tienes orgasmos alucinantes?
Mientras tus fantasías sexuales no te lleven a la cárcel, no hay razón para que no las pruebes en la vida real.
Explorar las fantasías sexuales
Cuando se trata de fantasías sexuales, puede que te preguntes: «¿Por qué no limitarse a lo habitual y cómodo?».
Pero aquí está la cosa: sumergirse un poco más en el mundo de las fantasías sexuales no es sólo para condimentar las cosas. Es un viaje que ofrece algunas ventajas increíbles.
En primer lugar, explorar estas fantasías puede mejorar mucho tu intimidad. Piénsalo: cuando compartes y exploras nuevos aspectos de tus deseos, no sólo aprendes sobre los distintos escenarios que te excitan.
También descubres nuevas facetas de ti mismo y, de paso, te acercas más a tu pareja. Es como abrir un nuevo canal de comunicación que estaba esperando a ser sintonizado.
Y hablando de comunicación, es increíble lo cerca que puedes sentirte de tu pareja cuando empiezas a compartir tus fantasías sexuales.
No se trata sólo de las fantasías en sí, se trata de crear confianza y comprensión. Estás diciendo: «Oye, confío en ti con estos pensamientos internos, y quiero conocer los tuyos también».
Este tipo de intercambio puede fortalecer tu relación de formas que quizá no esperas.
Pero hay algo más. Explorar las fantasías sexuales puede ser como una minirrebelión contra todos esos tabúes y normas que la sociedad nos ha impuesto.
Se trata de decir: «No me ataré a lo que ‘se supone’ que me gusta o hago».
Es una oportunidad para explorar tu sexualidad en tus propios términos, sin el bagaje de las expectativas sociales.
La aventura te espera en el país de la fantasía
Dicen que el tipo de fantasías sexuales que uno tiene dice mucho del tipo de persona que es, y algunos incluso llegan a afirmar que se inspira en sus miedos y sueños.
Personalmente, no me apetece hablar de los aspectos técnicos y científicos de las cosas, y quiero sumergirme de lleno en las fantasías sexuales que puedes probar en la vida real.
Así que, damas y caballeros, aquí tienen sugerencias excitantes que pueden probar la próxima vez que les apetezca darle un toque picante a las cosas en el dormitorio.
1. Jugar a disfrazarse
Aunque suene un poco vulgar, muchas personas no tienen el valor de acercarse a sus parejas para jugar a disfrazarse. No te preocupes, porque te sorprendería saber cuánta gente está dispuesta a ponerse un disfraz para apaciguar una fantasía sexual.
Tanto si acabas disfrazándote de la Princesa Leia y Han Solo, como si empiezas con algo sencillo como enfermera y paciente traviesos, el cielo es el límite cuando se trata de jugar a disfrazarse. ¡No olvides la ropa interior sin entrepierna!
[Leer: La guía de juegos de rol sexuales para principiantes con ejemplos de disfraces].
2. Usar juguetes
No nos referimos a los habituales, como las esposas y los vibradores. Hay todo un mundo de juguetes sexuales esperando a que juegues con ellos. Desde el Picobong Transformer hasta el Tantus Juicer, haz realidad tus fantasías sexuales jugando con estos juguetes tan codiciados.
Ya sea en solitario o con tu pareja, estoy seguro de que os lo pasaréis en grande. Ah, sí: no olvides comprar lubricante extra.
3. BDSM
BDSM son las siglas de Bondage, Disciplina, Sadismo y Masoquismo. La película 50 Sombras de Gray convirtió este tema tabú en algo aceptable, así que ¿por qué no darle un giro y disfrutar de este sexy estilo de vida?
Ten en cuenta que existe una gran variedad de prácticas, así que asegúrate de consentir sólo lo que te sientas cómodo haciendo y recibiendo. Empieza por informarte en grupos de chat y blogs antes de buscar pareja.
4. Escena de violación
Según un artículo publicado en Psychology Today, «desde 1973 hasta 2008, se han publicado nueve encuestas sobre las fantasías de violación de las mujeres. Muestran que aproximadamente cuatro de cada 10 mujeres admiten tenerlas (entre el 31 y el 57 por ciento) con una frecuencia media de una vez al mes.»
La agresión sexual es algo horrible y, sin embargo, muchas mujeres se entregan a estas fantasías eróticas. No hay mal que por bien no venga, así que agarra a tu pareja *previo consentimiento, por supuesto* y oblígala a entregarse sexualmente a ti.
Tanto si eres hombre como mujer, funciona en ambos sentidos. Id a por todas juntos y montad una escena de secuestro por si acaso.
5. Juegos de rol
La diferencia entre los juegos de rol y los disfraces sexuales es que los primeros se centran más en el argumento que en el vestuario. Quizá sea la fantasía más fácil de complacer.
Los ejemplos incluyen prostituta y cliente, fontanero y ama de casa aburrida, y chico de la piscina y MILF.
6. Practicar la cornudez
La cornudez es más común de lo que crees. Es tan popular que Internet ha creado un término para describirla. Básicamente consiste en que el marido deja que su mujer se acueste con otros hombres.
Él no tiene ningún problema con ello y, de hecho, se excita con ello.
No te avergüences de comentárselo a tu mujer, porque al fin y al cabo, que ella pueda acostarse con Machos Alfa mientras tú la observas disfrutando puede excitarla a ella también.
7. Tríos
¿Por qué no invitar a un tercero al dormitorio? A muchas parejas les encanta hacerlo, así que no hay razón para que no lo pruebes.
Tanto si invitas a un amigo de mente abierta a unirse a la diversión como si buscas a alguien de fuera de tu círculo de amigos, el mundo sexual de los tríos es tu ostra. Puede ser un tema complicado para abordar con tu pareja, pero sin duda merece la pena intentarlo.
8. Orgías
También conocida como fiesta sexual, una orgía es algo que sacia a todos los implicados. Piensa en ello como alcanzar orgasmos múltiples en equipo.
Tanto si te penetran varias personas a la vez como si lo hacéis por turnos, las orgías son básicamente tríos con el doble o incluso el triple de participantes.
9. Columpio
Si no te apetece algo tan loco como una orgía, o te da vergüenza que más de una persona trabaje contigo, el intercambio de parejas es justo lo que necesitas. Básicamente es hacer trampas con consentimiento. Implica cambiar de pareja sexual con otra persona, por lo que sigue habiendo intimidad y privacidad.
Hay fiestas que se dedican a este estilo de vida, así que investiga con tu pareja y haceos un favor asistiendo a una.
10. La que se escapó
Tanto las mujeres como los hombres fantasean constantemente con la que se les escapó. Tanto si os habéis acostado juntos en el pasado como si habéis llegado a la puerta pero nunca os han invitado a entrar, es hora de que saques tu pequeña agenda negra y hagas algunas llamadas para ligar.
Tanto si ya están unidas a otra persona como si están solteras, puede que estén dispuestas a un pequeño lío de una noche.
11. Sexo en público
Desde unirse al club de la milla de altura hasta hacerlo en el baño del pub local, muchas fantasías sexuales implican hacerlo en cualquier lugar menos en casa. Tanto si quieres hacerlo en secreto como si quieres que los demás se enteren de lo que estás haciendo, hay un sinfín de lugares en los que puedes hacerlo de forma sucia y ruidosa.
Por ejemplo, metiéndole el dedo a tu mujer en el cine, haciéndole una mamada en un vestuario, practicando sexo en la sala VIP de la discoteca o dándote un buen revolcón en el coche.
12. Ante un público
Si estás orgulloso de tus proezas sexuales y quieres que el mundo sepa de lo que eres capaz, lo mejor es que hagas una pequeña película porno y la cuelgues en Internet. Puedes ir a por todas y presumir, o puedes colocar la cámara de forma que no capte vuestras caras.
Otra forma de practicar sexo delante de un público sin preocuparte de que se entere tu madre es la retransmisión en directo. ChatRoulette, un sitio web que conecta aleatoriamente a personas de todo el mundo para chatear por webcam, es una buena opción.
13. Escapadas a lugares exóticos
Imagina intimar en un lugar completamente fuera de lo común, como una playa desierta, un bosque frondoso o incluso en lo alto de una montaña. Se trata de romper con la rutina del dormitorio y añadir un elemento de aventura y novedad.
Hay algo emocionante en la combinación de belleza natural y pasión. Además, el riesgo de estar en un lugar ligeramente impredecible añade un poco de emoción extra.
14. Juego de Poder
Esto es más que el típico escenario BDSM. Se trata de jugar con diferentes dinámicas de control, en las que uno de los miembros de la pareja adopta un papel de mando mientras el otro se somete.
La belleza de esta fantasía reside en el intercambio de poder y confianza. Es una forma de explorar la dominación y la sumisión, pero dentro de un espacio seguro y consensuado. Se trata de empujar los límites y explorar el control en un contexto sensual.
15. Masajes sensuales
Transformarte en masajista o masajista de tu pareja puede ser increíblemente erótico. Empieza creando ambiente con velas y aceites, y luego pasa gradualmente a una experiencia más íntima y excitante.
El escenario es ideal para los preliminares, ya que ayuda a crear tensión y expectación. Además, es una forma fantástica de conocer aún mejor el cuerpo de tu pareja.
16. Amante misterioso
Esta fantasía consiste en fingir ser extraños con tu pareja. Podríais quedar en un bar, actuar como si no os conocierais de nada y flirtear como si fuera la primera vez.
Es una forma de recrear esa excitación y misterio iniciales que sientes cuando conoces a alguien por primera vez. Esta fantasía sexual puede añadir una capa fresca y estimulante a tu relación sexual.
17. Juego de edades
El juego de edades consiste en adoptar papeles en los que uno de los dos actúa como más joven o más mayor, pero no se trata de las edades en sí.
Tanto si hay una diferencia de edad real entre tu pareja y tú como si no, este tipo de juego de rol tiene más que ver con la dinámica que crea, como que uno de los dos sea el que cuida y el otro se sienta cuidado. Es una forma estupenda de explorar las distintas facetas de cada uno en un entorno seguro y totalmente consensuado.
Se puede jugar con las ideas de cuidado y protección, lo que realmente puede agitar las cosas y traer una nueva capa de diversión a su relación.
18. Aventuras voyeuristas
A diferencia de ser observado, aquí se trata de observar a otros. Puede ser tan sencillo como observar a tu pareja mientras se da placer a sí misma o a otros adultos.
Es una forma de explorar la excitación desde una perspectiva diferente y puede resultar increíblemente excitante para quienes se excitan con estímulos visuales.
19. Juegos sensuales con la comida
Dicen que con la comida no se juega, pero esa regla no se aplica en el dormitorio. ¿Qué te parece añadir fresas con nata o chocolate?
Utilizar golosinas comestibles durante los momentos íntimos puede ser una forma lúdica y deliciosa de descubrir el cuerpo del otro. Añade toda una nueva capa de placer sensorial a vuestras experiencias, haciendo que cada encuentro sea único, sabroso y memorable.
20. Juegos de rol históricos
Los juegos de rol históricos son perfectos para los amantes de la historia y los dramas de época. ¿Por qué no disfrazarse y recrear escenas de una época histórica concreta?
Ya sea encarnando la refinada elegancia de la época victoriana o la vibrante desenfreno de los locos años 20, añade un sabor único a tus partidas de rol.
Y, oye, puntos extra si puedes añadir algunos versos de Shakespeare o un discurso antiguo: nada da más sabor al dormitorio que un «tú» o un «tú» bien sincronizados.
Consejos para explorar las fantasías sexuales
Si tú y tu pareja sois nuevos en el mundo de las fantasías sexuales, puede que os parezca que os estáis adentrando en territorio desconocido. No te preocupes, se trata de ir paso a paso. Aquí tienes algunos consejos generales para guiarte en este apasionante viaje:
1. Empezar poco a poco
Empiece con algo ligero y sencillo. Quizá compartir una simple fantasía durante una charla de almohada o probar una nueva postura.
La clave es ir a un ritmo que os resulte cómodo a los dos. A medida que os sintáis más cómodos, podéis ir introduciendo ideas más elaboradas.
2. Inspiración en la literatura y el cine
Los libros, las películas y las historias eróticas son excelentes fuentes de ideas. Pueden despertar tu imaginación y ofrecerte escenarios que considerar.Además, comentar una escena sexy de una película o un libro puede ser una forma sutil de introducir el tema con tu pareja.
3. Conceptos básicos de los juegos de rol
Empieza con papeles conocidos para facilitar la experiencia. Puede ser tan sencillo como fingir que son desconocidos que se encuentran por primera vez.
La idea es divertirse y explorar distintas facetas de la personalidad en un entorno lúdico.
[Leer: Juegos de rol sexuales: Cómo probarlos y las 35 mejores ideas de juegos de rol para parejas].
4. La comunicación es la clave
Habla abiertamente de tus deseos y límites. Es fundamental que ambos os sintáis cómodos y de acuerdo.
Recuerda que se trata de mejorar vuestra experiencia juntos, no de empujar a nadie a algo para lo que no está preparado.
5. Ambientación
A veces, una atmósfera adecuada puede marcar la diferencia. Cree un entorno que complemente su fantasía.
Puede ser una luz tenue, música específica o incluso la configuración de una habitación en particular. Esto ayuda a que los dos tengáis la mentalidad adecuada.
6. Utilizar palabras seguras
Especialmente en las fantasías que implican juegos de poder o bondage, acordad una palabra de seguridad. Se trata de una palabra que cualquiera de los dos puede utilizar para pausar o detener la acción inmediatamente.
Es un aspecto importante para garantizar que las cosas sigan siendo seguras y consentidas.
7. Infórmate
Sabemos que probablemente estés deseando lanzarte a la diversión, pero escúchanos: hacer un poco de deberes antes puede merecer la pena. Hay un montón de recursos en Internet que pueden guiarte a través de cualquier cosa nueva que estés intentando explorar.
Conocer los conceptos básicos no sólo mejora la experiencia, sino que también la hace más segura y divertida. Confía en nosotros, un poco de lectura previa te permitirá sumergirte en el agua con confianza.
8. Respeta los límites de cada uno
Está bien tener límites. No todas las fantasías deben realizarse, y algunas pueden quedarse en fantasías. Se trata de respeto mutuo y de entender el nivel de comodidad de cada uno.
Así que si a ti te gusta una fantasía en particular, por ejemplo algo aventurero como un juego de rol en público, y tu pareja no está de acuerdo, no pasa nada. La clave está en encontrar un término medio o explorar otras áreas que os entusiasmen a los dos.
9. Informe sobre la fantasía
Después de probar una fantasía, charla sobre ella. Comenta lo que te gustó, lo que no funcionó y cómo te sentiste. Esto puede ayudar a perfeccionar sus experiencias para el futuro y garantizar la mejora continua.
10. Que siga siendo divertido
Recuerda que, en el fondo, explorar las fantasías sexuales es divertirse y añadir emoción a vuestra relación. No te lo tomes demasiado en serio, ríete de cualquier incomodidad y disfrutad juntos de la experiencia.
Hay todo un mundo de experiencias esperándote
Todos tenemos algún tipo de fantasía sexual, y no hay absolutamente nada de malo en explorarlas siempre que se aborden con consentimiento, respeto y mente abierta.
Abrazar estas fantasías puede aportar un nuevo nivel de excitación e intimidad a tus relaciones, mejorando tu comprensión de ti mismo y de tu pareja.
No tiene sentido ser un mojigato cuando se trata de aventuras sexuales. El sexo es un acto placentero y debe disfrutarse como tal. Cuanto mejor lo hagas, más feliz serás.
¿A qué esperas? Pruebe estas fantasías sexuales y aumente el morbo hoy mismo. Tanto si eres un explorador experimentado como si acabas de empezar, siempre hay algo nuevo y estimulante por descubrir.